Espero que disfrutéis de mis aventuras y pueda transmitiros todas aquellas sensaciones que experimento en la montaña y que hacen sentirme cada día más vivo.

Vía Gene en el Cabeçó d´Or.(V).

Nueve de Julio, escalada en Alicante... ufhhh!!! QUE CALOR . Esto es lo primero que se nos viene a la cabeza, si hemos escalado alguna vez por la zona en estas fechas, pero va ser que no. Estudiamos bastante bien la vía, sobre todo su horientazión (este) y llegamos a la conclusión que si madrugamos y a las siete de la mañana ya estábamos escalando, posiblemente antes de que nos diese el sol ya estaríamos de vuelta en el coche y buscando la ansiada cerveza que seguro nos habíamos ganado.
Decidimos bajar el viernes por la noche y vivaquear por la zona, así conseguiríamos estar al amanecer a píe de vía.
El primer largo tiene de todo un poco, arbustos puñeteros, el primer paso de quinto y un poco de travesía. El segundo largo, continua con travesía y un tramo por una chimenea sencilla en la que vale la pena salirte fuera de ella a su parte izquierda y hacerla más expuesta por la sensación de patio, pero mucho más segura por sus buenos agarres. El tercer largo es bastante sencillo, seguimos en travesía ascendente (siempre en dirección sur), hasta llegar a una plataforma herbosa y con mucha piedra rota, creo que le llaman el repisón, en ella se encuentra un pino muy característico en la vertical que se utiliza para rapelar. El cuarto largo es de transición, cambiamos el sentido de la escalada de sur a norte, por unos canchales hasta quedarnos de bajo de una mancha negra en la pared con una especie de endidura y un pinito en su parte superior, no pongo ningún seguro en sus treinta metros. En el quinto largo, volvemos a escalar, tramos casi verticales donde aparecen clavos y otros seguros fijos en los momentos más decisivos. El sexto largo "te pone las pilas", nos habíamos olvidado que estábamos en una pared que es prácticamente vertical la mires por donde la mires menos por la vía que estábamos realizando que busca la forma de llegar a la parte superior lo más cómoda y sencíllamente posible. De repente te encuentras a caballo de un espolón con buenos agarres menos una pequeña placa de quinto grado, en el que de vez encunado miras hacia a bajo y el corazón bombea con más fuerza, no te habías dado cuenta de lo alto que ya te encontrabas hasta este momento y no te habías acostrumbado a la altura, así que el palo es mayor y a la vez satisfactorio.El último tramo es sencillo, un trozo de cresta bastante descompuesta y muy aérea, hasta llegar a una brecha el la que se encuentran dos reuniones para rapelar, una más moderna con sus dos parabolts, cadena y anilla que nos devolverá a pie de vía y otra más antigua con cable de acero que en un solo rápel de 60m. nos dejará en una pedrera en la otra parte de la pared.
Decidimos rapelar por la parte que habíamos escalado. Una cordada que nos encontramos mientras subíamos, nos dijo que en dos rápeles de 60m. llegaríamos al suelo. En el primer rápel, decidimos quedarnos en una repisa antes de llegar al "repisón", si la vista no nos engaña parece que a la cuerda le faltan dos metros para llegar al suelo. El tercer rapel, se realiza desde el pino del repisón. Bonito rápel voladizo, durante unos 35m.

La Gene es bonita y para iniciarse en la escalada clásica bastante recomendable. Pero me he quedado con un sabor agridulce en mi mente... creo que la culpa de ello ha sido ver a otras cordadas escalar esta pared por vías verticales, con mucho más grado que el nuestro y porque no reconocerlo me han dado mucha envidia. Necesito escalar más!!!